Son muchos los factores a tener en cuenta a la hora de adquirir nuestra nueva vivienda. Vamos a enumerarte los cuatro factores más importantes para poder elegir el piso de segunda mano que mejor se adapte a tus necesidades y con la seguridad de que sabes lo que estás comprando.

  • Cargas y deudas del propietario
    Lo primero que se ha de comprobar es si el inmueble que queremos adquirir tiene algún tipo de deuda ya que pasará al nuevo propietario una vez realizada la compra. En el Registro de la Propiedad podremos solicitar una nota simple para verificar quién es el titular y si existen cargas asociadas como una hipoteca. Este trámite tiene un coste de 9 euros y se puede pedir por internet o de forma presencial.

    Saber si está al día de pagos de la comunidad ya que si está programada una derrama aún no pagada, deberemos hacernos cargo del pago nosotros. Este tipo de información lo facilita la comunidad de propietarios. Solicitar los recibos del impuesto sobre Bienes e Inmuebles (IBI) para revisar que esté al corriente de pago

  • Antigüedad del inmueble.
    Saber cuándo se construyó el inmueble nos puede dar una pista del estado de sus sistemas eléctricos y estado de la fontanería. Comprobar interruptores, tomas de agua como los grifos y si las puertas y ventanas aíslan correctamente del clima y el ruido exterior. Prestar especial atención a posibles marcas de goteras o humedad en los techos, y cercos en las ventanas, y si hay paredes o suelos abombados. Es importante que sepamos el presupuesto orientativo de la reforma, si hace falta hacerla, en el piso de segunda mano.

    Recomendamos comprobar la referencia catastral para saber realmente los metros que tiene el inmueble así como de sus metros útiles. Podría haber ocasiones en las que el propietario se haya apropiado de zonas comunes para inflar el precio. Este trámite es gratuito y se puede ver teniendo la referencia del inmueble o la dirección de éste.

Obra de segunda mano

  • Estado general del edificio.
    Comprueba si existen grietas en las zonas comunes, si existe algún olor fuerte y el estado de la fachada. Estos detalles también pueden hablar de cómo son las personas que viven en ella y que pueden pasar a ser tus vecinos en un futuro. Una vez pases a ser propietario de un piso en el inmueble tendrás la responsabilidad de hacerte cargo de reparaciones y conservaciones.

    Puedes pedir si el edificio ha pasado la Inspección Técnica de Edificaciones (ITE). Consiste en una inspección que pasan todas las construcciones al menos cada 10 años. También puedes solicitar en el ayuntamiento posibles expedientes de disciplina donde el piso o inmueble haya incumplido normas urbanísticas del municipio.

  • Conocer el barrio.
    El último punto y no menos importante son los elementos que tenemos alrededor de la vivienda. Conocer los servicios más cercanos como comercios, transportes, escuelas, zonas verdes, etc. Valorar si esa disposición cumple con nuestras necesidades.

    Recomendamos hacer varias visitas ya que se trata de tu futura vivienda, y en diferentes momentos del día para que puedas hacerte una idea más cercana de lo que será vivir ahí.

Si estás pensando en adquirir un piso de segunda mano te recomendamos que mires nuestra oferta de pisos y casas. Todas las viviendas que ofrecemos tienen nuestro sello de garantía evitando encontrar sorpresas desagradables en el futuro.